Las sesiones de Metamedicina, tanto las presenciales como las on line, se realizan en un ambiente distendido, armónico y relajado y sólo se usa la palabra. Acompañamos a la persona a conocer el origen de su problemática permitiendo que pueda indagar en sus sentimientos y emociones y en las vivencias relacionadas con éstos. Después, el proceso de Liberación de la Memoria Emocional se realiza en un estado de relajación profunda.
La sesión se realiza usando un método inductivo; es decir, el consultor de Metamedicina no supone nada, no da un diagnóstico ni parte de la idea de que conoce lo que le pasa a la persona, sino que la acompaña e investiga con ella partiendo de lo que vive (emociones, síntomas y experiencias) para descubrir dónde y cuándo se grabó una determinada ecuación en su cerebro emocional (p.ej. “sexualidad = algo sucio”; “expresarme como soy = no soy aceptado/a”; “comida = consuelo”, etc.) que hace que su cuerpo o psique reaccionen de esa determinada manera que ahora le conflictúa o le limita.
Con la técnica de la liberación de la memoria emocional, el consultor de Metamedicina lleva a esa parte de la persona (generalmente el niño o niña que sufrió esa determinada herida) a expresar y liberar sus emociones y a enfrentarlas esta vez desde una nueva comprensión. Esto permitirá que su cerebro acepte una nueva perspectiva consciente y amorosa de lo sucedido, lo que permitirá a la persona vivir desde otro lugar y no volver a atraer esas mismas circunstancias a su vida. Haciendo un símil, buceando en la parte oculta del gran iceberg que es el inconsciente, se encuentra el origen del problema y se arranca de raíz la hierba para que no vuelva a crecer y plantar en su lugar la especie que deseemos.
La terapia de Metamedicina supone, en definitiva, una historia de amor con uno mismo, un proceso de autoreconocimiento que lleva a la persona a tomar las riendas de la propia vida y la responsabilidad de la propia curación.